María es, no sólo una gran coach, sino además una bellísima persona que aplica en su propia vida las herramientas que nos brinda, haciéndola empática y sensible. Una incansable estudiante en mejora continua que busca justo eso: ayudar a quienes llegamos a ella para convertirnos – tanto en lo personal como en lo profesional – en la mejor versión de nosotros mismos, a través de información y recursos que nos permiten observar, lidiar, sanar, aceptar, crecer y vivir.
Su paso en mi camino sigue dejando huella…
Gracias María por brindarme las herramientas para vivir (y disfrutar) mi presente, y poder seguir mejorando día con día.