Conocí a María hace 4 años en un seminario que se trataba de PNL, de negocios, de comunicación, etc. Mi encuentro con ella fue de inmediato directo porque me gustó su desenvolvimiento y manera de comunicarse, junto con su simplicidad y simpatía: no es fácil encontrar una persona siempre sonriente y disponible. Ella me habló de su profesión de Coach y yo de mi trabajo. Después nos despedimos e intercambiamos nuestros mails y celulares, pero en ese momento no me fijé el objetivo de poder trabajar con ella mis metas profesionales.
Después de algunos meses participé en Roma en el curso de Tony Robbins y entendí la importancia de construir un camino de conciencia del propio potencial y de las propias limitaciones para poder después superar perspectivas restringidas y limitantes.
La experiencia fue muy importante para mi, pero no me sentía capaz de continuar yo sola este camino, por eso ¡le pedí ayuda a María! A través de sesiones via Skype y otras cara a cara, pudimos destacar algunos “malos hábitos” así como el modo de superarlos. No fue fácil porque nos encariñamos también de los “malos hábitos” y yo se que soy una persona “terca” por lo que el trabajo con María fue fuerte, ella veía cosas positivas en mi que yo no veía. Podía sólo pensar que era difícil cada cosa que me proponía pero su paciencia fue grande y poco a poco había algo imperceptible que cambiaba en mi, hasta que inicié también yo a pensar que ¡yo misma podía verdaderamente construir algo de nuevo para mi!
Me comprometí sobre todo a seguir mis “pasiones” y realizar mis sueños con los pies bien puestos en la tierra y la cabeza bien en alto, libre, creativa, llena de energía!
“Creer en el propio potencial”, ¡esto me enseñó María!
“Construir para uno mismo una nueva visión” ¡se los recomiendo a todos!
